A lo largo y ancho de la geografía terrestre los antiguos habitantes dejaron
construcciones que nos dan pistas de la importancia que tenían algunos puntos
específicos en la energía terrestre. Desde el continente americano, pasando
por Europa, África o Asia. Estos centros son enclaves energéticos.
En nuestra época actual es difícil determinar cuántas eran las utilidades que les
daban en el momento de la historia en los que fueron construidos. Además de
centros de captación energética, puede que fueran portales que facilitaran el
tránsito a otros planos para obtener información importante para los habitantes
que vivieron en ese tiempo. Quizás fuesen puertas que permitían a estos
habitantes antiguos ponerse en contacto con entidades superiores, quién sabe.
Hoy día siguen conservando parte de la energía que poseyeron y ésta es
positiva para nosotros los seres humanos. Para aprovecharla no hay que hacer
gran cosa, simplemente estar presente y dejar que la energía del lugar penetre
en ti. Si estás familiarizado con la meditación estos lugares se prestan a
practicarla, abriéndote puertas a capacidades intuitivas que quizás pensabas
que no poseías.
Todavía no he visitado todos los enclaves que tengo en mi lista personal, pero
he visitado unos cuantos que te pueden servir de guía. Los que más conozco
se encuentran en España, Francia y Reino Unido y en su mayoría pertenecen a
construcciones megalíticas.
En España hay gran variedad de enclaves energéticos. Los mejor conservados
y respetados se encuentran en Menorca. La isla está repleta de construcciones
megalíticas: taulas, talaiots y navetas son sus principales representantes. Su
antigüedad no está determinada, los arqueólogos los datan entre 600 y 1000
años antes de Cristo, pero quizás sean más antiguos.
Extracto del libro El Poder de tu Energía.